A pesar de que se considere un clásico, contiene errores muy graves que provocan que 50 años después, esta película ya no sea la misma.

No dudo que en 1955 gustara mucho pero realmente me desconcertó la interpretación exagerada de Robet Mitchum, así como la excasa dirección de los niños y las lagunas en la historia.

Simplemente la película no aguanta y aunque empieza bien acabas deseando que acabe, por cierto de una manera bastante desilusionante, sin fuerza alguna.

No he visto mucho de los aspectos positivos que otras críticas han expresado, únicamente el ambiente creo que si consigue lo que busca pero por lo demás la he visto con falta de ritmo, y con malas interpretaciones.

El problema principal, aparte del porcentaje excesivo de secretismo entre 7 personas, se base en los continuos cambios de plano buscando una continuidad que no consigue porque la sensación es de que cada actor está leyendo su guión, no interpretándolo, principalmente un desastroso Eduardo Noriega y una Belén Rueda que nunca ha sido buena actriz ni lo va a ser ahora. Sólo Eduard Fernández y Pepón Nieto sostienen esta historia interesante pero mal gestionada.

Contra las lógicas reticencias que se pueda tener en ver otra película de este tipo, ésta no aburre prácticamente en ningún momento, interesa y se desenlaza de una forma bastante apropiada. La cámara nos presenta una mirada algo diferente en este tipo de thrillers y el elenco de actores, bastante efectivos, resuelven definitivamente la cinta hacia un trabajo salvable.

La recordaba interesante en sus primeros capitulos pero no pude terminar de verla porque antena 3 la eliminó prematuramente de la parrilla.
Ahora que la he visto gracias a internet pienso que he perdido el tiempo, porque la serie no hay por donde cogerla. La dirección es muy mala, el guión es una auténtica pena, los actores están algunos pasables y otros dan vergüenza ajena, sobre todo los niños.
Todo está lleno de planos típicos supuestamente embellecidos por el angulo de la cámara pero queda ridículo. El guión no se sostiene, las conversaciones son absurdas y hasta hay errores de gramática importantes.
Sí, es una serie de misterio, inhabitual en España, pero mezclada con varios dramas románticos que acaban cansando a mitad de la serie.
El desenlace es forzado y poco creible, principalmente en el desenlace de las historias de pareja.

Alegre cinta a pesar de tener a la enfermedad como motor de la historia, ésta contada quizás con demasiada dulzura pero con un buen final. La cinta se mantiene la mayor parte debido a los actores y al guión.