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9
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7.2
125,555
Fantástico. Romance. Drama
Un hombre (Brad Pitt) nace con ochenta años y va rejuveneciendo a medida que pasa el tiempo; es decir, en lugar de cumplir años los descumple. Esta es la historia de un hombre extraordinario, de la gente que va conociendo, de sus amores y amistades, pero sobre todo de su relación con Daisy (Cate Blanchett), la mujer de su vida. (FILMAFFINITY)
19 de febrero de 2009
19 de febrero de 2009
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta película tremendamente bien confeccionada no solo es una original y conmovedora historia de amor, sino también una indagación sobre como el paso del tiempo –y más concretamente lo que el físico Stephen Hawking denomina "la flecha del tiempo"- conforma el desarrollo de nuestras vidas. No voy a abundar en sus muchas virtudes ya suficientemente ensalzadas en este mismo foro, pero sí voy a señalar que si bien la anomalía que sufre -o disfruta- el protagonista resulta verosímil tal como está expuesta, no sucede lo mismo respecto a la absoluta falta de impacto mediático que con certeza atraería un caso tan excepcional. Se me ocurre que como mínimo el guionista podría haber introducido la figura -aunque fuera anecdótica- de algún periodista curioso al que le hubieran llegado rumores sobre este extraordinario caso, aunque luego, por alguna razón (tal vez un deseo de Benjamin Button de permanecer en el anonimato), el tema acabara no divulgándose. Abundando en esta línea también nos podríamos preguntar cómo es que ningún médico (¿es que el protagonista no ha enfermado nunca?) se ha enterado del caso y ha caído en la tentación de divulgarlo entre la comunidad científica. Lo que es seguro es que un caso así atraería la atención mediática y científica, y en poco tiempo el personaje en cuestión sería tan famoso como el presidente de Estados Unidos o cualquier superestrella del mundo del espectáculo. El reconocimiento de estas lagunas (que supongo no se perciben como tales en el contexto del relato –seguramente escrito en tono de fábula- de Scott Fitzgerald en que está basado la película) no impide, sin embargo, que estemos ante una gran película que ha acabado de confirmar a David Fincher como uno de los mejores y más interesantes directores del cine contemporáneo.