Haz click aquí para copiar la URL
Cuba Cuba · Euskal Herria
Voto de Jonbi:
7
Western. Bélico George Custer (Errol Flynn) llega a la Academia de West Point lleno de arrogancia y vanidad. Aunque su carácter indisciplinado le ocasionará numerosos problemas con sus superiores, debido a la acuciante necesidad de oficiales para la Guerra de Secesión (1861-1865), es enviado al frente. Terminada la guerra, se casa con Beth (Olivia de Havilland), pero pronto le asignan un nuevo destino: la guerra contra los indios. Al frente del Séptimo ... [+]
2 de julio de 2013
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Entretenida biografía del general Custer, que, pese a convertirlo en un héroe que por lo visto no fue, no por ello deja de merecer la pena echarle un ojo. Aunque sólo sea por ver a Errol Flynn pavoneándose con las excéntricas indumentarias que, esto sí parece ser cierto, utilizaba Custer.

Desobediente y aventurero, Custer hace carrera en el ejército mezclando mucha suerte y locuras que se convierten en heroicidades. Tras luchar contra los confederados en la Guerra de Secesión, se reengancha para mantener a los sioux a raya en West Point. Logra un tratado de paz con ellos, pero la avaricia de sus compatriotas les llevará de nuevo a la guerra y a la última y mítica batalla de Little Big Horn. Lo que en la película se presenta como una heroicidad y un sacrificio, más bien parece que fue un auténtico desastre militar, no sólo del séptimo de caballería del general Custer sino de todo el ejército. “Al infierno o a la gloria”, dice Custer que se dirigen, y aunque en la película parece ser la gloria, más bien se fueron directos al infierno.

Al margen del rigor histórico (una vez más), buen trabajo de manos de un experto en películas bélicas como Raoul Walsh, que más tarde volvería a trabajar con Errol Flynn (Objetivo Birmania, 1945). No puedo dejar sin comentar la treta del director en las escenas de cargas de caballería en la primera parte, en las que no se ve una sola batalla, ni siquiera al enemigo. Caballos cargando, cortinilla, y ale hop, “la carga ha sido rechazada”, nos dicen los oficiales en su despacho mientras leen los informes. Ahorrando costes.

También curiosos los diálogos sobre cebolletas que se trae Errol durante toda la película, y el tema del alcoholismo, que también se trata en la película. “Ningún hombre de este regimiento tomará un trago si antes no lo hago yo”, y es que en la vida real el bueno de Errol no tenía tanta voluntad para rechazar un trago.

Lo mejor, una frase que, creo, todos pensamos al ver películas del oeste: “Qué se creen ustedes los yankees, los únicos verdaderos americanos que hay aquí son los que están al otro lado de la colina con plumas en la cabeza”.
Jonbi
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow