La película nos muestra como la gente de un pueblo humilla, abusa y se aprovecha de una pobre chica que llega a él pidiendo ayuda porque un gangster la está persiguiendo. Leyendo la linea argumental da la sensación de que va a ser una estupenda película; sin embargo, tal y como está planteada cinematográficamente no vale nada. La razón es bien sencilla; Dogville en un teatro quedaría muy bien: en el cine no tiene sentido. Presentar una película sin decorados no es hacer cine, es hacer teatro.

Es una pena que Lars Von Trier no le haya dado la gana de hacer las cosas de forma seria porque con paredes, un perro de verdad y en definitiva con lo que normalmente tienen las películas; ahora estaríamos hablando de una de las mejores películas del cine.

Aviso para navegantes, es una película (más que película dejemosla en un engendro) muy dura.