Es habitual ver en las salas de los cines producciones en las que la protagonista es una niña que aparentando fragilidad, termina haciendo todo tipo de maldades. Por tanto, es muy dificil encontrar elementos innovadores en ese subgénero del terror. Por eso, cuando aparece una película en la que se introduce uno de esos elementos innovadores; un espectador con buen criterio termina agradeciéndolo, aunque sea una nimia innovación. Esta película responde a esa situación en la que hay un elemento innovador; aunque no se puede contar ya que responde al inesperado giro argumental que se da en la última parte del largometraje.

La huérfana cuenta la historia de una familia que a consecuencia de un trauma familiar, decide adoptar a una niña sin saber los enormes problemas que les causará. Aunque se anuncia como una cinta de terror, la producción huye de sustos y todo tipo de elementos propios del cine del terror para centrarse en un thriller puro y duro.

De la cinta hay que destacar lo bien construída que está la historia, la originalidad del final, y las buenas interpretaciones de los personajes femeninos. Sin embargo, tiene un ritmo demasiado lento en algunas de sus partes, el guión podía haber sido mejor, y el descubrimiento del secreto de la niña se debería haber dado de forma menos brusca.

De los actores, bastante bien; en especial la protagonista y la niña sorda. La pena ha sido un horripilante doblaje de la voz de la huérfana.