Una de las cosas que me gustaban de Black Mirror, es que SIEMPRE la serie y el guion estaban por encima del actor. Por muy conocido que fuera se convertía en un actor más, invisible en persona y mimetizado con su personaje.
Sin embargo aquí lo único que he visto ha sido un capítulo creado exclusivamente para Hanna Montana.
Esto no es Black Mirror, es el final alternativo "oscuro" de la serie de la pseudoactriz-cantante de Disney Channel.
No solo es aburrido y sin pies ni cabeza, sino que si le quitas la parte de la muñequita tecnológica (lo único salvable del capítulo) se convierte en un film de Antena 3 al más puro estilo de "Durmiendo con el enemigo" o similares.
Incluso con el planteamiento inicial se me ocurren un montón de líneas argumentales que podrían haber hecho de este capítulo lo que debería haber sido.
¿Dónde ha quedado la distopía tecnológica? ¿Dónde está la crítica social?¿Dónde está la tecnología futurista y los efectos en la sociedad?
Ojalá hubieran escogido a otra actriz actuando de verdad y no haciendo el mismo papel de siempre.
Ojalá hubiera aprovechado lo que tenían.
Prefiero un planteamiento trillado a lo 2001 Odisea en el espacio con esa "Alexa" a lo Eva (la de wall-e) pelifresa que lo que he visto aquí.
Una decepción de capítulo que no está a la altura de la serie...
Black Mirror no va sobre parodiar -malamente además- una industria actual, sino sobre relativizar la tecnología y mostrar lo que puede llegar a pasar en el día a día.
Black Mirror es tecnología y distopía. Es futuro. Es alienación.
No hay nada de eso en este capítulo.
No sé qué es esto, pero esto no es Black Mirror.