Fulci venía de una gran racha de películas, era casi tan bueno como Darío Argento. Esta es la primera película con la que inició su declive.

Es una película de terror sobrenatural y empieza bien, con esa ambientación en Egipto y el origen de una maldición. Tiene cierto misterio con ese atrapante inicio.
Los actores son conocidos de otras películas de Fulci y cumplen, Cosimo Cinieri y el niño Giovanni Frezza especialmente.
La banda sonora de Fabio Frizzi, aunque ya había sido usada en otra película anterior de Fulci también es destacable.

Sin embargo, la película se va volviendo aburrida y apenas aporta nada interesante, es un lío que no entiendes y además es aburrido. Se queda totalmente coja de esos momentos impactantes que Fulci solía meter en sus películas.
Hay algún momento interesante después, como es el ataque de los pájaros, ese momento está bien filmado, pero poco más tiene la película.

Por lo visto a última hora redujeron el presupuesto, hubo problemas con el productor y Fulci terminó la película a desgana, lo que provocó que al final quedase una película muy inferior a lo que podía haber sido.

Aun así, no le pongo una puntuación mala porque no deja de tener sus puntos interesantes y es mucho mejor que todo lo que vendría después de este director. Pero fue aquí donde empezó su descenso y ya no pudo competir con Darío Argento los años siguientes, él sí mantuvo un alto nivel bastante más tiempo.