Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Lucyfero:
7
Intriga. Drama Los Angeles,1928. Christine Collins (Angelina Jolie) es una madre soltera cuyo hijo desaparece sin dejar rastro. Algunos meses después, la policía le comunica que ha encontrado al niño, pero, nada más verlo, Christine se da cuenta de que no es su hijo. Sin embargo, está tan confundida que se lo lleva a casa, aunque exige que continúe la búsqueda de su verdadero hijo. Tachada de loca e incapacitada por la policía, por fin encuentra un ... [+]
16 de enero de 2009
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Desde la magnífica Mystic River, Eastwood nos tiene acostumbrados a la excelencia. Excelsitud que tantísimos años en la meca del cine curtió. Ahora lo que nos queda de él es la voz de un viejo rockero, de esos que quedan tan solo un puñado; y que todo lo que hace, lo hace bien. Su cine es bueno, sin duda alguna, films que evidentemente sobresalen de un horizonte cinematográfico de adaptaciones, remakes y comedias adolescentes. Y lo más importante, su hacer tiene ese aire que se evaporó en los años de los grandes clásicos del cine, para llegarnos ahora en forma de lluvia dispersa. Lluvia que sólo esos viejos rockeros son capaces de provocar.
"El Intercambio" comienza con el grandísimo peso de la excelencia de su director. Peso que soporta a duras penas la otrora vulgar Lara Croft, y que el papel en esta película le viene grande. Meryl Streep hubiese sido una legendaria Christine Collins allá cuando se rodó la genial “Los Puentes de Madison”. Pero Angelina Jolie no es siquiera la sonrisa de tan ilustre actriz, y el film cojea en algunos aspectos de la pata que debería encumbrarlo. Aún así, fíjense: la apuesto firme candidata al Oscar.
La gran labor del viejo Clint es coger una historia, que en manos de cualquier otro sería un simplón telefilm, y convertirla en la buena película que es. Porque todos sus aspectos nos recuerda a ese buen hacer del cine de antes, del de Billy Wilder o el de John Ford. Una ambientación perfectísima, un pulso narrativo tenso, muy tenso y lento (como acostumbra), pero que esa tensión impide que caiga en el tedio.
El comienzo es algo duditativo, en el cual la Jolie nos quiere hacer llorar, pero no lo hace. Aún así, la tensión sube enteros y el film llega a un punto de no retorno, asimismo transcurre la mitad de su metraje. La historia enseña sus cartas y deja atrás ese “tufillo” a telefilm, y todo se vuelve buen cine; todo se vuelve grande.
Si la Jolie no logró hacernos llorar, bien que lo hace ahora. A su vez, un noble policía y un escalofriante niño arrepentido nos descubre la horrorosa trama que hay detrás de una historia que parecía de cine de sobremesa; pero que afortunadamente ha girado por completo.
Y tras los créditos finales; sólo nos queda pensar que Easwood, viejo rockero, es uno de los grandes "tramposos" del cine. Pero bendigo haber caído sus trampas, como vendernos esta simple historia como lo ha hecho, como mostrarnos unos personajes muy buenos y otros muy malos sin decirnos el por qué. Aún así, finalmente se redime de sus trampas y los personajes comienzan a bailar, sobre una línea en la cual la bondad y la maldad se entrelazan con una soga justiciera, y con unos personajes que, lejos de ser tan planos, terminan por mostrarse complejos, penitentes y humanos.
Buena película, una ventana hacia el cine de antaño, por supuesto mejor, y seria candidata al Oscar, si una academia conservadurista como es la de Hollywood no se arriesga con El Caballero Oscuro.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Lucyfero
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow