Recuerdo en los veranos de mi niñez, que algunas noches proyectaban películas al aire libre y gratuitas, siempre era sesión doble, y siempre había una de Godzilla contra algún otro monstruo. No me preguntéis por el argumento, solo recuerdo que eran niponas y probablemente de baja calidad. Pero allí estábamos, empapándonos de esa "cultura" para al rato o al día siguiente jugar a ser Godzilla. Estábamos entretenidos una hora, y disfrutando.
Hoy al ver este largometraje me ha venido a la memoria esos momentos, y la trama sigue siendo simple, dos o tres monstruos que se enfrentan. Con algo más de calidad y más efectos especiales, pues aquí tienen más presupuesto y más medios, que entonces. Hemos ido al cine o hemos alquilado el DVD solamente para ver al monstruo, la historia, los personajes y los otros monstruos, que aquí parecen saltamontes o amantis religiosas, nos la suda, con perdón de la mesa. Y es de agradecer, y se nota que cuando Godzilla sale a escena el film gana enteros. Y su retirada, está pensada para que la sala aplauda, aunque lo que se aplauda es a Godzilla y no al largometraje en sí.
El largometraje tiene sus altibajos, empieza prometiéndonos una cosa y nos acaba dando otra, sus intérpretes son muy sosos, exceptuando a Walter White, transmiten poco o nada. Pero como ya he dicho antes, el protagonista es nuestro amigo Godzilla.