En los tres espacios de la melancolía reina el silencio. Con toques de nostalgia, de rencor, de miedo, de incertidumbre, de abandono. Y una estética minimalista que deja que el protagonista sea tanto el niño como su halo melancólico. ”El anhelo”, ”La respiración” y ”El recuerdo”.

Los poemas de un niño, escondido bajo las sábanas viejas de una institución que le ha salvado de la vida en la calle pero le prepara para las guerras más crueles.

No es un documental centrado en hechos ni datos históricos, es una inmersión en estos espacios de melancolía y en su interpretación en la infancia. Recomendado para quien quiera reflexionar sin juzgar nada, empapándose de la estética más preciosista. Pirjo Honkasalo es una directora poco prolífica, pero que promete deleitarnos con estos golpes de brutalidad y belleza siempre que su obra aparece en escena.

Desde las calles de Rusia, desde una academia militar, desde los campos de refugiados, desde una Chechenia abandonada y rota. Poética tristeza.