Película que se desarrolla en Pandora, una de las lunas del planeta Polifemo, en este lugar de vasta naturaleza existen una gran cantidad de especies, además de los Na’vi, unos humanoides azules de gran tamaño que viven en armonía con ella y que de hecho son la especie más inteligente y avanzada, aunque su desarrollo se da siempre en contacto con Eywa, la deidad creadora de todo.

En el año 2154 una colonia de seres humanos se encuentra muy bien establecida en este lugar, donde se extrae un mineral muy valioso llamado unobtainium, razón por la cual están en conflicto con los locales debido a la destrucción que causan. Más aún cuando un enorme yacimiento de este mineral, se encuentra justo debajo de donde viven los Omaticaya, uno de los clanes que pueblan el sátelite y en quienes se centra el film.

Jake Sully (Sam Worthington) es un ex-marine que se encuentra en silla de ruedas debido a un accidente laboral, él toma el lugar de su hermano asesinado para ser parte de un proyecto en Pandora. En este punto es donde aparecen los avatares, que son Na’vi creados para que mediante una máquina se pase la conciencia de un humano a estos para utilizarlos y vivir como ellos, Sully deberá involucrarse con los Omaticaya.

Avatar es una enorme producción de ciencia ficción presentada por James Cameron hace ya seis años, quien trabajó el propio guion y la cual se convirtió prácticamente en su Opus magnum. Una obra de enorme belleza visual e imaginativa, Cameron y compañía desarrollan completamente una cultura tan rica como la enorme naturaleza de Pandora, lenguaje incluido, donde se confronta la terquedad del humano en aras de seguir “avanzando” sin importarles a costa de qué se logra.

James Cameron nunca ha sido un gran constructor de personajes y aquí no se queda atrás, razón por la cual los de Avatar son completamente planos y sin mayor profundidad, en especial los humanos, no hay un estudio detallado de ellos por lo cual los encasilla de tal manera que se vuelve odioso, todo dentro de este panorama de esta lucha entre los humanos: científicos y militares, más los pobladores locales, flora y fauna incluida.

De Avatar se dijo muchas cosas, como que iba a revolucionar el cine y la forma de hacerlo, referencias que sin duda se enfocaron en la forma tecnológica de filmar la captura de pantalla y las pantallas verdes en producciones de semejante magnitud. Pero esto le ha caído como una patada allá donde más duele, puesto que varios perdidos creían que iban a hacer evolucionar el cine en cuanto a su historia o algo similar.

Este punto me parece primordial para saber la forma en cómo se evalúa la obra, porque es claro que el film de Cameron no tiene una gran pericia argumental, es un guion bastante arquetipo donde no se arriesga mayor cosa, sin embargo, este no debería ser un punto culminante simplemente por la gran experiencia que ofrece el realizador, visualmente el film es esplendoroso y el director logra amarrar muy bien su historia en dicho contexto. Para conseguir finalmente un trabajo entretenido y de buen ritmo a pesar de su metraje.