Esta peli la vi yo allá por los 80, en vídeo de alquiler. Se trata una aceptable revisitación del western, destacando en ella muchos de los leitmotivs del género: los grandes espacios abiertos (fotografía a cargo de John Bayley), el saloon con su piano y sus jugadores de cartas, las calles entarimadas de esos pueblos, la camaradería entre los vaqueros, los duelos (bien filmado el duelo final entre Kevin Kline y Brian Dennehy),... y hasta las plantas rodadoras que arrastra el viento (que según he leído por ahí se llaman estepicursores).

La cosa arranca bien, con ese Kevin Kline buscando agenciarse un revólver por cuatro chavos para enfrentarse al matón de turno; pero pronto la historia se vuelve atropellada y va perdiendo interés. Los personajes son mas planos que el busto de Keira Knightley, y todos sin excepción se alinean en el lado de los buenos o de los malos, sin claroscuros.

Se mantienen algunos de los principios del cine de acción comercial de consumo rápido; hay muchos tiros y muchas bajas, pero a la hora de hacer un recuento final resulta que: