"¡Rompe Ralph!" es el mejor ejemplo de como aprovechar al noventa y nueve por ciento un universo particular, en este caso el de los videojuegos. Eso que no consiguió "Hotel Transilvania" (Genndy Tartakovski, 2012), para mi enorme decepción, si que lo consigue la ultima propuesta de Disney.
"¡Rompe Ralph!" es una pequeña joya en todos los sentidos. Es una joya en su aspecto visual tremendamente vitalista, alegre e imaginativa, gracias a su colorido desbordante. Es una joya narrativa, ya que sin necesidad de una historia excesivamente compleja arma una trama diferente al resto y que te atrapa, sin olvidarnos de lo fácilmente que consigue el ansiado equilibrio entre lo infantil y lo adulto. Es una joya en lo referente a personajes, ninguno se desaprovecha, cosa que suele ocurrir fácilmente en el cine de animación.
En resumidas cuentas, "¡Rompe Ralph!" es una joya de esas de las que resulta enormemente sencillo enamorarse. Me es muy complicado encontrarle algo malo.