Cuando se trata de internarse en el mundo del comic, lo primero que se debe hacer es abrirse a situaciones fantásticas donde los super poderes son un ingrediente de uso diario. Pero más que eso, se debe comprender el tono preciso donde la imaginación se funde con todos los géneros. Y cuando se habla de un personaje como Ant Man encarnado por Rudd, además debe pensarse en que las cosas seguramente van a suceder de una manera tan ligera, divertida y refrescante como deberían ser los comics en general.

Es cierto que las últimas presentaciones del universo Marvel han incorporado cada vez más el ingrediente humorístico en sus super producciones, así los diálogos ingeniosos y salpicados de humor ácido han ido permeando en las diversas películas de “El Hombre Araña”, “Los Vengadores” (con todo y “Guardianes de la Galaxia”) y Ant Man difícilmente podría escapar a ese aire de diversión… y no lo hace, se divierte consigo misma y logra engancharnos en el Mood acción, aventura y situaciones de humor. (Solamente basta ver el lenguaje “científico” que usan los protagonistas para referirse a los fenómenos que deben afrontar y eso da una dirección precisa de cuán divertida es esta película).

No solamente el guión se mantiene en una arena de Acción/Ciencia Ficción y Comedia, sino que los actores protagonistas parecen habérselo pasado bomba en la filmación.

Si bien existen algunos puntos poco claros, la velocidad en la narración de Ant Man y la Avispa no permite que se reflexione en ellos y sigue en su viaje de diversión pura y sin complicaciones.

Aunque ayuda haber visto la primera película de Ant Man y la de “Capitán América”, en esta ocasión la historia parte de esas referencias al pasado, pero no se basa en ellas para seguir. Así que requiere poco esfuerzo para entender lo que se nos plantea.

Los plots más fuertes se enfocan en el aquí y ahora de la vida de Scott y sobre todo la misión que los Pym deben llevar a cabo mientras el mundo crece o se hace diminuto a su alrededor; porque la ventana para realizar el arriesgado rescate de Janet Van Dyne (Michelle Pfeiffer), la madre de Hope (y a quien francamente podría habérsele sacado más jugo), se encuentra atrapada en un universo a nivel “microsubcuántico” desde hace treinta años. Este plot también viene a ser una forma de revalorar al personaje de Hope/Wasp colocándola incluso encima (porque es más inteligente) del mismo Ant Man.

El trabajo de Peyton Reed en la dirección da concreción a la historia, logrando una cinta que se siente con más confianza en ella misma y que ha madurado la esencia de poder ser una super aventura cómica.

Rudd deja claro que tiene más que agarrado al personaje: un tipo común y corriente, que mete la pata con regularidad y quien aparte de ponerse un traje que lo hace super héroe, tiene responsabilidades como padre, pero no desperdicia la oportunidad de divertirse como niño en tobogán.

La historia de Ant Man y la Avispa recalca sobre un tema importante: la familia. El papel de Scott como buen ejemplo para su hija y la lealtad que Hope y Hank, que sin importar los años de esfuerzos creen que Janet está viva en algún lado y harán lo que sea para rescatarla.

La banda de ex compañeros en el crimen de Scott, ahora tratan de ganarse la vida “honradamente” y son la mejor parodia del peor grupo de ladrones readaptados de la historia, Kurt (David Dastmalchian), Dave (“T.I.” Harris), y en especial Luis (Michael Peña) que carismáticamente se roba cada escena.

Si bien está inscrito en el universo de Marvel, Ant Man parece desarrollarse en una dimensión paralela, esa que da el no ser un super héroe de primera línea, por lo que prácticamente y en cierto sentido, puede hacer lo que le dé la gana con su historia. Eso sí, recuerda que es VITAL quedarse a las famosas escenas post créditos, no te salgas inmediatamente. Te tienen una sorpresa.

Así, entre la vigilancia sofocante de la policía, el perverso criminal que persigue a Hope para robar los inventos de Hank, una desesperada y violenta muchacha llamada Ava, o El fantasma (Hannah John-Kamen) que quiere por fin librarse de los efectos de una explosión cuántica y sus propios problemas personales debido a su prisión hogareña, Scott debe salvar el día.

Otro plus de Ant Man y la Avispa son sus secuencias de acción; no por la violencia y acrobacias, que las hay, sino por los inesperados efectos cómicos de ser pequeñito y de un momento a otro, ser enorme. (Si puedes verla en 3D y en Imax vas a ver la mejor versión de la película).

Dentro de la arena de los super héroes y después de la tragedia de “Avengers”, Ant Man llega justo a una posición privilegiada, donde existe el heroísmo pero al mismo tiempo, el juego, la diversión y los buenos sentimientos prevalecen como un remedio contra la adversidad. Se interna sin tapujos en un campo de imaginación fantástica en estado puro, que nos lleva sin escalas a ese mundo de los juegos de los niños, donde todo es absolutamente posible y deseable, sin importar lo absurdo que sea. Lo vital es que sea divertido y Ant Man y la Avispa, lo es con creces.

Escrito por Fabián Quezada León
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