Cansino ejercicio "de autor", falso biopic, con un guión tramposo e impostado, abordando unas situaciones, vivencias y personalidades desde la fantasía indocumentada. Nada de trato periodístico, no se advierte la más mínima traza de mostrarnos algo verosímil o que sucedió realmente. El argumento desarrolla una historia inventada sobre unos personajes reales en una fecha concreta y punto. La misma fase publicitaria lo confirma: es una fábula a partir de una tragedia real. Toma anécdotas verdaderas -la balanza, las cacerías de Navidad- pero todo lo demás es absoluta ficción. Y eso a mí no me vale. No veo diferencia entre "Spencer" y "Abraham Lincoln, cazador de vampiros", ya que las dos inventan situaciones sobre personajes reales, emplean algún hecho o situación verdadera y, en el fondo, comparten género, son dos películas de terror.

¿Como puedes mostrarnos los pensamientos de la protagonista? ¿Los conoces? Y todo el paralelismo con Ana Bolena me resulta tópico, superfluo y que no viene a cuento. Y que tenga visiones... no sabía que se fumase "petas" en el palacio. Todo huele a falso, desde la relación con los hijos a la interacción tensa que tiene con el marido y la familia de éste. Y no hablemos de la relación con el servicio, lo que ya roza la ciencia-ficción psicotrópica. No hay que copiar a "Dowton Abbey" para parecer más británico. A nivel técnico, esa fotografía quemada, como las fotos de los años 70, da un toque original, pero poco más.

Stewart se inventa una Lady Di, de la que copia peinado y maneras, y quizás acentos, pero poco más. Ésta es la típica película para optar a los oscars pero que, con los años, nadie recordará.