Una familia inmigrante (en Glasgow [Escocia]) paquistaní-musulmana prepara la boda concertada de su hijo de 26 años con una prima, el destino hará que ese chico de origen paquistaní y musulmán conozca a un maestra irlandesa, católica y separada.

¡Tiembla!

Sólo con esa presentación hasta el más ignorante, en el tema religioso, puede llegar a temblar de lo que puede pasar en esas familias.

Una película sobre las minorías étnicas y la Iglesia, que muestra el problema que siguen teniendo aún ambas para aceptar a unos y a otros.

La Iglesia para aceptar a una mujer separada y con un “amigo” musulmán, y las minorías étnicas con ese gran afán de no romper la genética/religión de su país o etnia, y de concertar bodas.

Loach la defensa de la libertad de los contrayentes y no del matrimonio forzado. Un problema que se creía superado en la Europa actual, pero que con el film de Loach se muestra todo lo contrario.

Existen otros problemas paralelos a la historia central; por ejemplo la hermana pequeña del protagonista tiene el problema existencial, por una parte se considera paquistaní a cara pública, pero en casa se enfrenta a su padre reprochandole el porqué de su vida en occidente, si tratan y hacen que sus hijos tengan la misma vida que en oriente.

Una película que carece de influencias de “jolibú”, algo que yo siempre agradezco.

La fotografía no es muy buena, el ambiente en toda la película es triste, muy gris escocés, sin embargo las secuencias rodadas en Mallorca tienen un caracter especial.

El guión es muy bueno, cuida hasta el más mínimo detalle.

Es una pelicula más para ver y no para comentar.

Nota 8 sobre 10.