Bueno, pues que tomen nota los realizadores de 2012 y otros engendros parecidos, esto es cine comercial.

¿Guión plano?, pero vamos a ver, ¿vosotros medís con el mismo rasero esta película y la última de Tarkovsky?, si es así aplaudo vuestra ignorancia.
Un festival visual y sonoro, una historia típica y tópica plagada de personajes sin ninguna ambiguedad pero bien contada, perfecta medida del tiempo, un desarrollo bastante aceptable de los personajes y todo un maravilloso universo donde sumergirse con niños o sin ellos.

En definitiva, vale la pena ir a ver está oda a la belleza, aunque es imprescindible verla en 3D y dejar los aires de pseudointelectual en casa para otro tipo de películas. Si la veis así, os garantizo que disfrutareis como enanos.