Esta es mi película número trece que veo del señor Allen y la verdad es que tras las brillantes valoraciones de la gente esperaba algo a la altura de su cine habitual y la verdad es que me ha decepcionado de una forma ligera. No achaco las culpas al guión sino al formato en que está grabada. El formato falso documental resulta efectivo durante su primera media hora haciendo reír mucho con mucho humor negro resultando muy agradable y divertida pero a medida que pasan los minutos por más que sea cortita se me hizo algo pesada el estar repitiendo los mismos chistes de los cambios del personaje de Allen. No soy fan de este tipo de películas rodadas de esta manera pero por ejemplo Borat me resulta una comedia maravillosa y no está apenas valorada, no es cuestión de comparar sino que a mi parecer Woody Allen funciona más en otro tipo de cintas, se entiende el sarcasmo, humor negro y sátira por momentos pero sinceramente prefiero otras películas que me han divertido y entretenido más en su filmografía. Quizás sus más afines lo pasarán de lujo pero aún así es una cinta interesante y divertida a ratos. Por encima de la media aun siendo de un Woody Allen menor en mi humilde opinión.