La productora capitaneada por el actor Adam Sandler, Happy Madison, nos trae esta simpática, interesante y bastante predecible comedia con toques románticos. Tim Morris (David Space) va a por, la que espera ser, una gran cita a ciegas con una chica llamada Missy. El resultado es desastroso y decide pasar página. Pasan los meses y durante un descuido en un aeropuesto conoce a la que cree la chica de sus sueños. Por casualidades de la vida, la empresa, en la que trabaja Tim, organiza un viaje a Hawái y decide invitar a la chica en cuestión mediante un sencillo mensaje de texto. Se espera al amor de su vida y se encuentra con la chica de su primera cita, Missy. Por curiosidad, las dos chicas se llaman igual, así la confusión. A partir de ese momento, la estancia en Hawái para el bueno de Tim se va a convertir en una pesadilla. Como en toda película producida por Sandler podemos ver a algunos de sus amiguitos a modo de secundarios o cameos. Aquí podemos encontrar al mencionado David Spade como cabeza de cartel, y a Nick Swardson, a Jonathan Loughran y a Rob Schneider como secundarios. Como he dicho al principio, es bastante predecible. Si no hubiera acertado en mi predicción, me hubiera esperado otra cosa, pero no ha sido así, porque ya se ve desde el minuto uno cómo va a terminar, más o menos. Además, punto a favor en lo referente a su duración, cerca de hora y media, que para esta clase de films es perfecto. No hay más tela que cortar. Mi nota final es de 6/10.