Me han sorprendido críticas en las que he leído que si es vacía de contenido, un bodrio, aburrida...y digo sorprendido porque creo que esta película es mágica y punto, no hace falta buscarle peras al olmo, es un musical diferente donde los haya. Cierto es que la narración se relega a un segundo plano en más de una ocasión, pero eso es lo que menos importa. El director desde el principio busca que te atrape esa historia algo inverosímil, es como un mundo que él mismo ha creado. Lo que te queda de esta historia es el románticismo, las canciones, los bailes...se trata de un cuento lleno de amor.

Metiéndote en la película sientes que es cierto que sólo se necesita amor para vivir, que es posible superar las barreras y que se van querer pase lo que pase, vives lo que pasa la pareja hasta el final. El pero es que se cuenta al principio como termina esta historia de amor, ya que sin eso hubiera sido más cuento aún. La música y las canciones siempre están al servicio de la historia , es un musical muy entretenido. Respecto a las interpretaciones, la química entre Ewan y Nicole es espectacular. Ambos se compenetran estupendamente cantando, los dos lo hacen genial, aunque al final se come un poco ella a él en cuento a escenas dramáticas se refiere. Al principio parece que toda la historia gira en torno a él y poco a poco ella va ganando protagonismo( sobre todo porque la ves como una idiota al principio y a él como un bohemio enamoradizo y al final ella lo salva antes de morir...). Lo demás como que te dan un poco igual, por lo menos a mi el resto de personajes se me olvidaban, sólo prestaba atención a los dos protagonistas, gracias a la gran complicidad y química que tienen. El duque está claro que está hecho para caernos mal y empatizar más con el amor de la pareja, y el resto pues poco pintan, bajo mi punto de vista bailan al son de la pareja, sólo aparecen para crear aún más tensión, hasta cantando y bailando, ya que muchas veces no son ni canciones completas en las que se puedan lucir ellos solos, con fragmentos de los dos protagonistas que siguen cantando o sufriendo.
La dirección artística es increíble, y la fotografía tampoco está nada mal, muy novedosa, llevándote de un lado a otro de la película sin tiempo para tomarte la historia con calma.