Es increíble que en el primer episodio los zombies corran tanto como los de 28 semanas después, y en el capítulo dos, sean tan lentos y torpes como les suelen presentar en The walking dead.
También resulta increíble o sorprendente que parezcan inteligentes y se hagan pasar por ahogados en el episodio piloto o conduzcan un autobús, haciendo creer a los vivos que hay supervivientes del ataque al campamento.
Mención aparte a la escena del bebé zombié, que tan pronto está vivo, como sin haber sido mordido, a los 5 segundos esté no sólo muerto, sino que presente síntomas de descomposición, como si llevará semanas muerto.
La escena del perro esquimal zombie, que por arte de magia aparece dentro de la base, sin que sepamos como demonios entró....
Y así podíamos estar sacando fallos a razón de media docena de ellos por capítulo.
Lo dicho, si te gustan los zombies y te dejas llevar sin pensarlo mucho, podrás disfrutarla, sino... me temo que la serie se te hará insufrible con tantos despropósitos y chuminadas.