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7.6
60,338
Comedia. Drama. Romance
Hollywood, 1927. George Valentin es una gran estrella del cine mudo a quien la vida le sonríe. Pero con la llegada del cine sonoro, su carrera corre peligro de quedar sepultada en el olvido. Por su parte, la joven actriz Peppy Miller, que empezó como extra al lado de Valentin, se convierte en una estrella del cine sonoro.
8 de marzo de 2012
8 de marzo de 2012
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Con un argumento bastante simplón, unas situaciones y personajes simpáticos (con la intencionada exageración e histrionismo que en esa época debían derrochar los actores de cine para suplir la presencia de la voz), el toque retro del b/n, el perrito y, el riesgo de ser muda (golpe de efecto e inteligencia comercial); no deja de ser para mí un entreteniemiento aceptable y, diferente. Pero, por mucho que lo intente, no veo yo en ella esa luz, esa magia o ese algo especial que, la ha convertido en fenómeno de masas y, ante la que se ha desplegado la rendición incondicional en base a unos supuestos méritos que, se me antojan exagerados. Veo yo en este tema más marketing en estado puro que otra cosa. Ni siquiera la ensalzada hasta el infinito partitura de acompañamiento me parece tan, tan acertada y sublime... Cierto es que, debo ser una excepción a juzgar por las apasionadas alabanzas que le dedican tanto críticos reputados como, de medio pelo, (por no hablar del público en casi masa... ) Bueno, no pasa nada. Una puede equivocarse y, hasta reconocerlo para no ser vilipendiada, tachada de ignorante e, incluso satisfacer a jueces de opinión ajena pero, al final, cuando esté sola, sin nadie que necesite mi redención; cuando no haya nadie a quien deba complacer con una disculpa por sentir lo que siento y, no otra cosa... no podré renegar de mi propia opinión: para mí no es tan buena.