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España España · Barcelona
Voto de did79:
8
Drama. Romance Marc (Hanno Koffer) es un agente de policía que vive con su novia Bettina, embarazada, y con la que en apariencia mantiene una genuina relación de amor y comprensión. Es una pareja feliz. Pero las dudas llaman a la puerta de Marc cuando Marc conoce a Kay (Max Riemelt) en un curso de formación. El desconcierto, el miedo, la incomprensión de sentirse atraído por otro hombre. Una clase de deseo que hasta ahora desconocía, que incluso ... [+]
4 de julio de 2019
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Los conflictos de la homosexualidad no aceptada, o su tardío descubrimiento, suele ser un tema recurrente dentro del cine de temática denominada gay. Uno de los personajes es expuesto a unas circunstancias que le son adversas e incluso desconocidas para el interesado, que poco a poco irá descubriendo algo que se encontraba encerrado en su interior.

Precisamente este es el tema de la película dirigida por Stephan Lacant, donde dos compañeros de la Academia de policía entablan una relación sentimental, que no tendría mucho más misterio si uno de ellos no fuera heterosexual (o eso aparenta) y estuviera esperando un hijo. El encontrarse en un mundo también hostil, como es el entorno policial, y el tener que enfrentarse a su incipiente condición sexual, lleva al protagonista a un conflicto personal que acabará salpicando a todos aquellos que forman parte de su entorno.

Como vemos, nada nuevo bajo el sol, historia mil y una veces contada, pero que, gracias a ciertos elementos, consigue una entidad propia, que hace que este modesto film tenga una fiel legión de fans (entre los que me incluyo). Buena dirección, excelente fotografía, unos magníficos actores por un lado, manidos clichés y excesiva frialdad mostrada en la interacción entre ambos por otro, son los factores que caracterizan el film y le otorgan ese halo de pequeña producción estupendamente realizada.

Sin embargo, lo más destacable de la cinta, y lo que conlleva que gran parte del público conecte con ella, es el proceso psicológico por el que deambula el sufrido protagonista, pasando desde la extrañeza de sentimientos que experimenta sin saber aún porqué (reflejado en esas pequeñas miradas furtivas) hasta esa dolorosa culpabilidad que refleja hacia su mujer (mostrada a través de esos vaivenes de la relación, en la que el protagonista cae cada vez que es incapaz de asumir sus emociones) o el miedo a aceptarse a uno mismo. Gracias al trío principal de actores, este drama de proporciones épicas sensible evita caer en histrionismos, mantiene una contención sorprendente a la par que emotiva. Todo un acierto por haber apostado por este camino más discreto.

Por último, el film reserva una última idea romántica sobre el amor, en la cual se refleja que el amor no entiende de géneros, sino de personas (de ahí que fracase en segundas intentonas). Desde estas páginas pedimos una segunda parte que siga indagando en esta peculiar historia de amor y que nos brinden la tan rumoreada continuación.

Lo mejor; Max Riemelt (irresistible) y Hanno Koffler (sufrido)desprenden la química suficiente como para hacer verídicos sus personajes.

Lo peor; A pesar de ser emotiva y del buen trabajo psicológico que se hace de los personajes, quizás un poco más de intimidad no hubiera estado de más.
did79
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