Patton de Franklin J. Schaffner, es un drama bélico basado en la biografía del general George S. Patton. Dirigida con un ritmo pausado y tranquilo, es personal y objetiva a la hora de tratar la vida del militar, siendo en general una obra portentosa, soberbia y magistral, y estando definida de modo inteligente y provocador para el público, por la propia personalidad del personaje.
La fotografía, es impactante y espectacular en las escenas bélicas, con imágenes llamativas y estimulantes por su violencia, y por ser inspiradoras y rica en múltiples matices bélicos. Y la música, es alentadora y sugerente, con sonidos intensos y penetrantes que llaman la atención con profundidad y fascinan por dar inquietud y amenaza en los momentos claves.
Las actuaciones, con personalidad propia son brillantes y auténticas. Con George C. Scott con carácter propio, profundidad psicológica y persuasión en un oscarizado papel, y con convincentes interpretaciones de Karl Malden, Stephen Young, Michael Bates y Michael Strong. Usando para los personajes unos vestuarios y caracterizaciones alusivos y elaborados en detalles, propios según el personaje en una excelente dirección artística.
El guion, escrito por Francis Ford Coppola y Edmund H. North, es biográfico, y narrado de modo interesante, atractivo y apasionante, argumentado de modo verosímil y belicoso, es en ocasiones enardecedor, y de principio a fin arrollador e impetuoso. Empleando una narrativa al principio del protagonista que da a entender ya su fuerte personalidad, y el resto del film usada con tono clásico, enérgico y equilibrado.
Para finalizar, cabe destacar unos planos y movimientos de cámara avanti y retroceso, panorámicos, reconocimiento, subjetivos, seguimiento, travellings, cámara en mano y planos generales soberbios y originales en un gran trabajo técnico. Unos efectos sobrecogedores e impresionantes en las batallas, muy competentes y eficientes para su momento. Y un montaje lineal, narrativo y biográfico con gran ritmo y eficacia al contar varios años de la vida del general.
En conclusión, la considero una obra inmortal e imperecedera, digna ganadora de 7 oscars, entre ellos el de mejor película, por ser excelente y portentosa de principio a fin, por mostrar con acierto la biografía de un hombre singular. Recomendable por su dirección, guion, actuaciones (en especial la de George C. Scott), fotografía, música, efectos, movimientos de cámara, vestuarios y caracterizaciones, montajes y diálogos que la convierten, en una obra bélica biográfica sin igual.