Vale, que Judd Apatow esté revitalizando un género que siempre estuvo de capa caída (dudo que la trilogía de “Porky's” sea alguna vez carne de filmoteca, aunque nunca se sabe), con ramalazos brillantes como “Supersalidos”, pero en el fondo estamos ante la misma repetición de pedorras tontunas y fervores erectiles del púber americano.

Mucho más graciosa e inteligente que las inefables “American Pie” no pasa de una ocurrencia sobre unos nerds-freaks en busca de alcohol para ligar con unas chicas y sus innumerables aventuras. Los chistes obviamente son de contenido sexual y escatológico como marca la tradición del ‘bodrievil’ teenager y las situaciones son respaldadas por los secundarios: sin la trama de McLovin y los policías ‘supersalidos’ la cinta no sería gran cosa.

Esto no es la genial “Freaks and Geeks” del propio Apatow ni nada que se le parezca pero resulta entretenida y anima el cotarro de la comedia adolescente trillada con lo ‘políticamente incorrecto’. Me resulta imposible suspender a una película con un final tan inteligente.