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Voto de Hermida:
5

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5
6.4
24,727
Western. Drama
Montana, 1925. Los acaudalados hermanos Phil (Cumberbatch) y George Burbank (Plemons) son las dos caras de la misma moneda. Phil es impetuoso y cruel, mientras George es impasible y amable. Juntos son copropietarios de un enorme rancho donde tienen ganado. Cuando George se casa con una viuda del pueblo, Rose (Dunst), Phil comienza a despreciar a su nueva cuñada, que se instala en el rancho junto a su hijo, el sensible Peter (Smit-McPhee). [+]
8 de diciembre de 2021
8 de diciembre de 2021
19 de 27 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pues me esperaba más de este western con aspiraciones de thriller psicológico que no termina de encajar al no conseguir ni una cosa ni la otra. Un guión demasiado lento, parado en nimiedades, y cuya tensión atraviesa por altibajos pero en general, en vez de ir en crescendo decrece a medida que avanza la película hasta llegar a aburrir.
Predecible contra lo que se supone un buen suspense. Ni la sublime actuación de Cumberbatch logra compensarlo, una pena, pues bajo otra batuta diferentes y armoniosas notas sonarían. Luego los demás ni fu ni fa. El hijo homosexual, el hermano reprimido, la madre alcohólica... Los personajes apenas están bien construidos, tampoco los actores sostienen el papel. Patrones culturales universales demasiado manoseados como para que despierten interés, nada destaca en ellos, no se crea ese vínculo emocional con el espectador. Mención especial a la floja actuación de Kirsten Dunst, en su línea por otra parte desde el famoso beso invertido a Spiderman.
En cuanto a western, se explota muy poco, se queda relegado, elegido por el director como fondo y decorado para la película, nada más. La historia podría haberse dado en cualquier otro escenario y circunstancias.
En fin, una vez más la crítica profesional queda embelesada por obras bohemias de grandilocuentes aspiraciones que para el resto de los mortales que no pretenden otra cosa que pasar un buen rato frente a la pantalla se quedan en eso, ni fu, ni fa. Será arte, será una obra maestra, pero a mí... Y a la inversa, tantos otros filmes vilipendiados por esa misma crítica que uno afronta con las expectativas por el suelo pero que terminan erigidas en portentosos descubrimientos.
Predecible contra lo que se supone un buen suspense. Ni la sublime actuación de Cumberbatch logra compensarlo, una pena, pues bajo otra batuta diferentes y armoniosas notas sonarían. Luego los demás ni fu ni fa. El hijo homosexual, el hermano reprimido, la madre alcohólica... Los personajes apenas están bien construidos, tampoco los actores sostienen el papel. Patrones culturales universales demasiado manoseados como para que despierten interés, nada destaca en ellos, no se crea ese vínculo emocional con el espectador. Mención especial a la floja actuación de Kirsten Dunst, en su línea por otra parte desde el famoso beso invertido a Spiderman.
En cuanto a western, se explota muy poco, se queda relegado, elegido por el director como fondo y decorado para la película, nada más. La historia podría haberse dado en cualquier otro escenario y circunstancias.
En fin, una vez más la crítica profesional queda embelesada por obras bohemias de grandilocuentes aspiraciones que para el resto de los mortales que no pretenden otra cosa que pasar un buen rato frente a la pantalla se quedan en eso, ni fu, ni fa. Será arte, será una obra maestra, pero a mí... Y a la inversa, tantos otros filmes vilipendiados por esa misma crítica que uno afronta con las expectativas por el suelo pero que terminan erigidas en portentosos descubrimientos.