¿Comedia? Hay aspectos trágicos indudables, nacidos, no, como ha escrito alguien aquí, de las religiones, sino de la brutalidad humana, que se coloca por encima de todo, también de la religión. ¿O es que los ateos no se matan entre sí?
Con habilidad, de manera coral, interpretada con una naturalidad y sencillez que sorprenden, la película es la visión de la mujer sobre esa brutalidad del macho, capaz de matar a otro por una simple idiotez.
Dirigida con sabiduría, sin alarde pero con maestría, la película se deja ver como algo insólito, tan distinto a lo artificial y previsible que es lo normal en cartelera o en televisión.
No perderse esta ocasión de ver algo distinto y muy bueno.