Definitivamente con esta película me ha quedado en claro que Dreamworks tiene algo que Disney no tiene: Talento para hacer secuelas. Y si no me creen, solo hay que revisar la lista: Shrek 2, Madagascar 2 o Kung Fu Panda 2. Todas aclamadas por la crítica e incluso consideradas mejores que sus predecesoras. Y Cómo entrenar a tu dragón 2 no se queda para nada atrás.

Ambientada 5 años después de la primera película, podemos ver que muchas cosas han cambiado en Berk y también en las personas que lo habitan*. Es curioso ver como la película ha crecido junto con sus personajes y es algo que se nota muy de principio. Cómo entrenar a tu dragón 2 es más madura que su antecesora (posiblemente una de las películas más maduras de Dreamworks) y es fantástico, ya que no solo los niños, sino también sus padres se sentirán fascinados por este nuevo mundo.

El apartado visual es espectacular. No solo por los efectos especiales que son una maestría en Dreamworks, sino también por su aspecto visual. El arte, el manejo de los colores, el diseño de los dragones y la evolución visual de los personajes desde la primera película. Todo está llevado de manera maravillosa.

La película, como ya dije, es más adulta que la anterior, y posee una trama con un gran ritmo y momentos realmente impresionantes, de esos que se quedan con uno después de salir del cine**. Simplemente la mejor película de animación del año.