Haz click aquí para copiar la URL
España España · Honor al Sabadell!
Voto de Grandine:
8
Cine negro. Intriga. Thriller En la ciudad de Los Angeles un agente de una compañía de seguros (Fred MacMurray) y una cliente (Bárbara Stanwyck) traman asesinar al marido de esta última para así cobrar un cuantioso y falso seguro de accidentes. Todo se complica cuando entra en acción Barton Keyes (Edward G. Robinson), investigador de la empresa de seguros. (FILMAFFINITY)
13 de mayo de 2007
43 de 63 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando uno empieza a ver "Perdición", es imposible que no se sienta inmerso en la historia que Wilder está retratando, pues desde esa ambientación tan turbia lograda con exquisitez, mediante un buen uso de la iluminación y la inclusión de una banda sonora muy adecuada, o esa narración en off que procede a desgranar la historia desde la perspectiva del protagonista, Walter Neff, contribuyen en gran parte a que el espectador se sienta uno más.
Además, el punto de partida, aun y a estas alturas, resulta tan vibrante como en otras grandes obras del género: Por esa relación que se establece bien pronto entre los dos protagonistas, por esos endiablados diálogos conformados soberbiamente para el deleite del espectador y por ese planteamiento que busca un poco de atención y la obtiene en seguida gracias a sus variadas virtudes, que no son pocas.

Sin embargo, la película peca de ser demasiado obvia. Y ojo, que cuando digo obvia no me estoy refiriendo a que pueda resultar previsible o tópica (sería una estupidez hablar de esos parámetros cuando estamos ante una obra de los años 40, una de las precursoras del género). Cuando digo obvia, me estoy refiriendo al direccionamiento que le da el cineasta a su film, pues tras ese direccionamiento, las intenciones de cada uno de los protagonistas y el como irán avanzando junto a la cinta resultan demasiado evidentes. En primer lugar, porque el trazo al que somete Wilder a sus personajes es demasiado esclarecedor, haciendo que en seguida sea visible el cauce que tomarán sus decisiones y cuales serán los aciertos y los errores de estos, cosa que evidencia un transcurso, si bien notablemente urdido y armado, no tan satisfactorio en otras vertientes. Y en segundo lugar, puesto que las explicaciones que se ofrecen entorno al caso principal, también resultan claras en exceso, haciendo que uno tenga la certeza de como terminará transcurriendo todo.

De todos modos, ese pequeño escape no es más que futileza si la comparamos con la envergadura de la obra, sobre como posee ese extraño magnetismo y como ese halo de turbación se apodera de la pantalla constantemente, cada vez que una de las reflexiones del protagonista se dilucida gracias a la voz en off antes mencionada.
De las que hay que ver. Sobre todo si eres uno de esos amantes del cine negro de siempre.
Grandine
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow