Espectacular... Reveladora. Sí, reveladora, esa quizá sea mejor palabra que la primera. Uno espera encontrarse con una típica comedia romántica – manida – o con suerte una buena comedia romántica, de esas que te hacen pasar un buen rato y te hacen reír a carcajadas, con sus momentos románticos inclusive... ¡Qué va! ¡esto es mucho mejor! Va mucho más allá. Es una historia de las de verdad, de las que te dejan huella y te hacen pensar. Cada minuto te hace dudar de cómo seguirá la trama, y cada minuto te sorprende o te deslumbra.

¿Lo mejor? Que la sinopsis te da una idea equivocada de la película. Esas son las mejores sinopsis, porque son las que te permiten disfrutar de lo inesperado.

No sé cómo vengo a dar con esta película ahora, pero agradezco haberla encontrado.