Pues es un gran papel para la despedida de un gran actor que ha participado en películas de dos milenios y dos siglos distintos, uno de los más importantes de la historia. Una película muy agradable que roza el drama y la comedia a la vez, muy bonita de ver. Conocemos el lado más personal y bonito de Redford y del personaje a quien interpreta. Un gran reparto con muchos nombres reconocidos pero que se centran en despedir a dicho actor, por lo más alto. Lowery sabe hacer cine de todo tipo, tanto personal y de autor como convencional, con un tratamiento vitalista de la historia. La edad no envejece. Muy interesante el planteamiento de las secuencias y de como hablar de la historia sin mostrarla. Una bonita historia de amor y de felicidad. Hay gente que hace cosas malas pero que realmente no tienen mal corazón. Una película que podría entrar perfectamente entre las 100 películas más agradables de ver del siglo XXi. Cada interpretación es una joya y cada personaje pinta muy interesante. No aburre en ningún momento e incluso se hace demasiado corta.