Durante 13 episodios televisivos, la muletilla del personaje creado por Stan Lee y Jack Kirby en el año 1961 dejó de ser "It's clobbering time!" (¡Es la hora de las tortas! o ¡Es la hora de pelear!, según la traducción que tocara) y fue suplantada por la que ilustra el título de la reseña.

En este caso no era un simple bocadillo característico, sino que era un mantra para provocar una metamorfosis, al mejor estilo del "¡Por el poder de Grayskull!" de He-Man.

The Thing A.K.A La Cosa A.K.A La Mole, el gruñón mutante rocoso de Los Cuatro Fantásticos, tuvo numerosas aventuras como solista en las historietas de Marvel, pero en 1979 los del estudio de animación Hanna-Barbera le inventaron una realidad nueva para la tele. Fue en el spin-off de los Picapiedra que se hizo en 1979, "Fred and Barney Meet The Thing". Un genio el se le ocurrió que como La Mole es de piedra iría bien en un programa junto a Pedro Picapiedra y Pablo Mármol.

Esta cosa rara fue posible gracias a que Marvel Comics publicaba por entonces las revistas de historietas de los personajes cavernarios. Eran dos segmentos individuales del show por lo que, gracias al cielo, The Thing nunca se cruzaba con los habitantes de Piedradura (Eso sí lo hicieron en el crossover de Scooby Doo con Batman y Robin y no salió muy bien).

El astronauta Ben Grimm fue suplantado por el escuálido adolescente Benji Grimm (Benji porque es chico, ¿captan?), estudiante de colegio y con una banda de amigos a lo Scooby Doo, que cuando una crisis lo requiere se transforma a voluntad en el famoso héroe, mediante el ritual de juntar sus puños uniendo los dos anillos mágicos que lleva (WTF?), exclamando en voz alta "¡Anillos de roca la Mole quiero ser!" ("Thing ring, do your thing!", en el inglés original). Entonces, tras un resplandor energético, ocurría un Big Bang a la inversa y miles de rocas anaranjadas aparecían de todos lados para implosionar en el cuerpo de Benji.

En la sección de Trailers está ilustrado este momento, chaucito.