El ingenio de Buster Keaton a la hora de producir los gags, las escenas de acción e incluso las escenas románticas de este film se mantiene intacto. Aquí se mezcla de manera perfecta la aventura y acción con la comedia, con varios momentos que hacen reír y con otros momentos llenos de frenesí que nos hace querer que el maquinista salga de los problemas en los que ni siquiera él sabe cómo se ha metido. Y de ahí viene el título de la crítica, porque aquí Buster simplemente se deja llevar por sus impulsos y por su amor a su amada y a La General, solo le importa rescatar a sus amadas, no ser un héroe.
Y hablando de las amadas de Johnny, Marion Mack cumple perfectamente con el papel de amada (curiosamente la actriz sólo apareció en 4 películas, siendo ésta la última) y tiene una gran relación con Keaton, no se siente como relleno ni es una simple excusa para el desarrollo de la película. Y La General, bueno, es un objeto inanimado pero también cumple.
Pasando a las escenas de acción, tampoco han envejecido. Casi todas suceden en unas vías de tren, pero a pesar de la poca variación de escenarios, ninguna aburre y todas cumplen con la función de hacernos disfrutar de las peleas desenfrenadas y hacernos reír. Destacar la ya mítica escena de Johnny al filo de la locomotora quitando como puede los troncos de las vías de tren, aunque la película ya de por sí está llena de escenas memorables. El largometraje también destaca por ser una dura crítica a la Guerra de Secesión, en la cual está basada y ambientada esta película. Aunque es una crítica algo desenfadada en comparación a otras como "El gran dictador", se hace notar y se destaca el sinsentido de las guerras.
En conclusión, "El maquinista de La General" es un muy interesante film de aventuras y comedia, con un Buster Keaton carismático y con escenas de acción que han pasado merecidamente a la historia.