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5.8
64,511
Comedia
Torrente es un policía español, fascista, machista, racista, alcohólico y del Atleti. Tiene un vecino llamado Rafi, al que le gustan las películas de acción y las pistolas, y que vive con su madre y su prima Amparito, una ninfómana. Juntos, Torrente y Rafi, patrullarán por la noche las calles de la ciudad. (FILMAFFINITY)
4 de diciembre de 2008
4 de diciembre de 2008
9 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
El actor cómico Santiago Segura, tras un cierto éxito como actor cómico televisivo, iba a descolgarse con el personaje que más fama le iba a dar, y ello grácias a un film rodado con muy pocos medios, y unas carencias que en lugar de perjudicar la película acabaron beneficiándola notablemente. Segura nos ofrece un film tremendamente imperfecto.
Si nos ponemos a buscar podemos encontrar un error casi en cada secuencia. Sin embargo, es muy difícil encontrar a nadie que no haya visto el film o como mínimo haya oído hablar de él. Y ello más que por la película en sí, se debe al personaje que compone el propio Segura, una caricatura de policia que viene a reunir en una sola persona todos los defectos del típico español: más que machista misógino, fascistoide, megalomaníaco, clasista, racista, amante de las mujeres, del alcohol y prácticamente de cualquier vicio habido y por haber, y encima admirador a muerte del Fary y del Atlético de Madrid.... Quien da más?
El film le muestra en toda su salsa, envuelto en unos trapicheos de los que lejos de imponer la ley quiere sacar tajada aprovechando su condición de agente de la ley. Segura no pretende hacer un retrato realista sino más bien surrealista, de un personaje que auna en una sola persona los peores vicios.
Y en esto Santiago Segura acertó plenamente, el aire de película "cutre", y mal trabajada fue un perfecto telón de fondo que acompañaba a tan siniestro personaje en sus peculiares aventuras, y el boca a boca hizo el resto. Si bien en cada visionado la opinión sobre la película puede disminuir considerablemente, no se puede negar que hay ciertos "gags" ingeniosos, y que ni el film ni lo que cuenta se toman demasiado en serio ellos mismos, lo que acaba beneficiándole y haciendo pasar un buen rato a quien lo vea, siempre y cuando no se implique demasiado y no se tome en serio lo que ve. Además hay que agradecerle que sacara del olvido al gran Tony Leblanc.
Si nos ponemos a buscar podemos encontrar un error casi en cada secuencia. Sin embargo, es muy difícil encontrar a nadie que no haya visto el film o como mínimo haya oído hablar de él. Y ello más que por la película en sí, se debe al personaje que compone el propio Segura, una caricatura de policia que viene a reunir en una sola persona todos los defectos del típico español: más que machista misógino, fascistoide, megalomaníaco, clasista, racista, amante de las mujeres, del alcohol y prácticamente de cualquier vicio habido y por haber, y encima admirador a muerte del Fary y del Atlético de Madrid.... Quien da más?
El film le muestra en toda su salsa, envuelto en unos trapicheos de los que lejos de imponer la ley quiere sacar tajada aprovechando su condición de agente de la ley. Segura no pretende hacer un retrato realista sino más bien surrealista, de un personaje que auna en una sola persona los peores vicios.
Y en esto Santiago Segura acertó plenamente, el aire de película "cutre", y mal trabajada fue un perfecto telón de fondo que acompañaba a tan siniestro personaje en sus peculiares aventuras, y el boca a boca hizo el resto. Si bien en cada visionado la opinión sobre la película puede disminuir considerablemente, no se puede negar que hay ciertos "gags" ingeniosos, y que ni el film ni lo que cuenta se toman demasiado en serio ellos mismos, lo que acaba beneficiándole y haciendo pasar un buen rato a quien lo vea, siempre y cuando no se implique demasiado y no se tome en serio lo que ve. Además hay que agradecerle que sacara del olvido al gran Tony Leblanc.