No hay peor sensación en el mundo, que tener altas expectativas por un filme y que al verlo estas caigan de repente. Bueno, pues esto es lo que sucede cuando ves esta cinta, en la que Hollywood repite la formula de Bodrio + Actores conocidos = Éxito, y vaya que les ha funcionado.

La cinta parte de una falacia científica que supone que los seres humanos usamos el 10% de nuestra capacidad cerebral, pero Lucy una mujer que por equivocación termina de ''Mula'' absorbe una droga que se le introduce a su sistema, lo que la hace adquirir una capacidad mental que avanza minuto a minuto ¿Con esto es lo suficientemente absurda? No, aún hay más. A medida que su capacidad cerebral se va incrementando Lucy es capaz de lograr cosas como controlar objetos, personas, controlar su metabolismo y adquirir la forma que desee. Si se lee la sinopsis o se ve el trailer, hasta se presume prometedora y proporciona ganas de verla, por eso visionarla completa la hace tan decepcionante.

La cinta cumple con entretener al espectador... durante los primeros 30 minutos, luego de esto lo único que entretiene es Scarlett Johansson marcando sostén. La narrativa se pierde minuto a minuto y las incongruencias se hacen más y más notables. Una cinta que no se sabe si es de Ciencia Ficción, Superhéroes o un documental de Terrence Malick por la cantidad de imágenes que se entrelazan con las escenas de la película. Pero lo más decepcionante es su desenlace, esa fue la gota que rebosó la copa.

En cuanto a el reparto, tengo que decir que por lo menos Scarlett Johansson no hace un mal papel, lo cual es bastante difícil con un guion tan malo y Morgan Freeman hace un papel completamente plano y se limita a explicarnos lo que el director quiere que sepamos, como si se tratase de un documental.

Pero en fin si a usted le importa un comino si la película parte de una premisa falsa y solo le interesa pasar un buen rato, véala... El cine es completamente relativo, puede que llegue a estar entre sus favoritas.