Asistimos a cómo una pareja de ancianos se refugia de una bomba atómica y de los efectos que van transcurriendo continuamente. Escalofriante, es la palabras. Ver cómo van sufriendo los efectos de la radiación, y todo el proceso desde que construyen el refugio hasta lo que va transcurriendo. Aunque ocurra en los años 80, podemos hacernos una idea de lo que ocurriría si volviésemos a esos terribles tiempos.

Una buena crítica a las guerras, las bombas atómicas y las consecuencias que traen a la humanidad, y que nadie piense en esto antes de soltar una bomba de ésta, y esto a pesar de que el abuelito cuenta cómo vivió la guerra y cómo actuaría ahora como si fuese una aventura emocionante y de la que guarda recuerdos, pero todo esto es para reflexionar.

Te hace reflexionar sobre el por qué pasan estas cosas, por qué las personas civiles, que no han hecho nada malo a nadie, tienen que sufrir estas consecuencias. No hay razón para una guerra ni para destruir a las personas. Destaco los diálogos de los dos abuelitos mientras transcurre la historia y los hechos, destacando sobretodo la ingenuidad de ellos ante todo lo que va sucediendo. Cierto es que a veces aburre un poco, ya que la película es muy monótona, pero hay diálogos bastante emocionantes, interesantes, e incluso divertidos. El efecto de mezclar animacion con imagen real es bastante bueno.

Su visionado la recomiendo, aunque tal vez unos niños se aburran demasiado debido a la monotonía. Un 8.