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Voto de TOM REGAN:
7

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7
6.4
384
Drama
Narra los últimos días del dictador Adolf Hitler y de su entorno en mayo de 1945 en su búnker en Berlín, así como el clima de demencia que reinaba en el Bunker en esas últimas horas de muchos de sus habitantes. Hitler, hombre senil que pasa de la tranquilidad a una violencia extrema, no admite su derrota... (FILMAFFINITY)
21 de octubre de 2009
21 de octubre de 2009
8 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
330/37(30/09/09) Muy buen film realizado para televisión este que nos retrata los últimos días del Tercer Reich, representados en el tiempo en que Hitler (Anthony Hopkins) pasó en el Bunker de la Cancillería de Berlín. Con una gran puesta en escena asistimos al Ocaso de un tipo que llevó al mundo a una espiral de muerte monstruosa, donde ya la cordura no le asiste, va de la encolerización a la depresión en un momento, sabe que el mundo que él había proyectado se va por el retrete y como buen loco quiere llevarse con él a cuantos más mejor, pudiendo haber escapado decide morir con la capital de su Imperio y mientras, en su última morada, el Bunker, van pasando todos los personajes importantes del nazismo, Alert Speer (Richard Jordan), Martin Borman (Michael Lonsdale), Joseph Goebbels (Cliff Gorman), Heinrich Himmler (Michael Sheard), el General Hans Guderian (Yves Brainville), Herman Goering (David King), etc. Cada uno muestra su forma de ser, en la que el que mejor queda es Speer, que es el único que se le ve con algo de cordura, el que le dice la verdad al dictador, y el que no hace caso de sus órdenes por el bien de Alemania, el resto son unos intrigadores que buscan su mejor salida, sin pensar en el país. Anthony Hopkins realiza un trabajo soberbio en la creación del Tirano, maneja el lenguaje corporal-gestual de forma sublime, no cayendo en el fácil histrionismo del personaje, lo borda, hace que nos transmita la evolución desde que lo vemos al principio manejando la mesa de mapas ante el Estado Mayor hasta su apagado final, demuestra maestría. Recomendable a los que gusten de hechos históricos trascendentales. Fuerza y honor!!!