Tengo que introducir mi comentario sobre Kingsman: El círculo de oro, advirtiendo que no soy un crítico especializado ni nada por el estilo, pero debo decir que he visto la película por completo y que me ha costado llegar a su desenlace más que el de la ganadora del Oscar a mejor película extranjera, La gran belleza.

Excelente reparto para un flojo y desenfadado thriller conspiranoico dirigido por un Matthew Vaughn, poco inspirado en el que se echan a perder el factor sorpresa y gamberro de la primera entrega, haciendo que Kingsman, se lleve un círculo de oro en mi puntuación personal.

A pesar de repetir la fórmula del éxito que le lanzó a la fama, Kingsman: El círculo de oro, deja claros síntomas de debilidad. Lo que hace años tenía cierta gracia, ahora empieza a resultar cargante, a pesar de ofrecer diversos momentos divertidos. Esperemos que sus responsables, no intenten estirar demasiado el chicle, porque algo desenfadado, cómico y original, podría convertirse en algo insostenible.

Kingsman: El círculo de oro, queda como una bochornosa y aparatosa producción de espionaje con humor que peca de grotesca, tediosa e insoportable.