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Voto de Jon:
2

Voto de Jon:
2
6.3
5,878
3 de marzo de 2013
3 de marzo de 2013
Sé el primero en valorar esta crítica
Lo único que realmente destaca de este relato es la interpretación con mayúsculas por parte de Sean Peann, pero el desarrollo de la trama y de los personajes no resulta satisfactorio.
Es difícil conectar con el argumento, que ofrece pinceladas del modo de vida del personaje principal y de cómo éste va descendiendo en la profunda oscuridad de la depresión y la incomprensión del mundo que le rodea.
Peca de falta de ritmo y de cohesión en todo su conjunto, en su afán por plasmar la decadencia y perdida de cordura del personaje principal, el argumento entra en una vorágine de sucesos confusos que no ofrecen un verdadero punto de interés.
Los momentos de soledad y reflexiones del personaje principal, parecen mensajes políticos subliminales de la situación actual de la sociedad y de cómo todo puede venirse a bajo en un pestañeo de ojos.
A pesar de ofrecer un atisbo de crítica política y social de la etapa de Nixon, todo se limita a un retrato de la perdida de esperanza y del camino a la locura, Sean Penn sabe exprimir sus capacidades interpretativas, pero no es suficiente para darle el aprobado a la película.
Es difícil conectar con el argumento, que ofrece pinceladas del modo de vida del personaje principal y de cómo éste va descendiendo en la profunda oscuridad de la depresión y la incomprensión del mundo que le rodea.
Peca de falta de ritmo y de cohesión en todo su conjunto, en su afán por plasmar la decadencia y perdida de cordura del personaje principal, el argumento entra en una vorágine de sucesos confusos que no ofrecen un verdadero punto de interés.
Los momentos de soledad y reflexiones del personaje principal, parecen mensajes políticos subliminales de la situación actual de la sociedad y de cómo todo puede venirse a bajo en un pestañeo de ojos.
A pesar de ofrecer un atisbo de crítica política y social de la etapa de Nixon, todo se limita a un retrato de la perdida de esperanza y del camino a la locura, Sean Penn sabe exprimir sus capacidades interpretativas, pero no es suficiente para darle el aprobado a la película.