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Voto de Honchkrow Corleone:
4

Voto de Honchkrow Corleone:
4
6.2
86,033
Ciencia ficción. Aventuras. Thriller
Lo que en el pasado fueron los Estados Unidos, ahora es una nación llamada Panem; un imponente Capitolio ejerce un control riguroso sobre los 12 distritos que lo rodean y que están aislados entre sí. Cada distrito se ve obligado a enviar anualmente un chico y una chica entre los doce y los dieciocho años para que participen en los Hunger Games, unos juegos que son transmitidos en directo por la televisión. Se trata de una lucha a ... [+]
10 de noviembre de 2012
10 de noviembre de 2012
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Escribiré la mayor parte de esta crítica con spoiler, pero antes ofreceré una pequeña opinión a rasgos generales sobre esta película.
Empieza bien, mostrándonos un trasfondo interesante, aunque con una estética que recuerda a "El quinto elemento" en sus altas esferas. Nos venden los Juegos del hambre como un concurso cruel y sanguinario, en el que tienes que venderte, promocionarte, para sobrevivir. Curiosa metáfora de nuestra propia sociedad y la fama. Nos presentan superficialmente a los concursantes, y al lío.
Y es a partir de ahí, al empezar la competición, cuando la película no deja de decaer y se pierde en sí misma. Para ello, como adelanté antes, usaré ejemplos en spoiler.
Empieza bien, mostrándonos un trasfondo interesante, aunque con una estética que recuerda a "El quinto elemento" en sus altas esferas. Nos venden los Juegos del hambre como un concurso cruel y sanguinario, en el que tienes que venderte, promocionarte, para sobrevivir. Curiosa metáfora de nuestra propia sociedad y la fama. Nos presentan superficialmente a los concursantes, y al lío.
Y es a partir de ahí, al empezar la competición, cuando la película no deja de decaer y se pierde en sí misma. Para ello, como adelanté antes, usaré ejemplos en spoiler.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Hay multitud de factores que provocan la decadencia de esta película, su decrecimiento:
-Los personajes no se definen, son intrascendentes. No los llegamos a conocer, por lo que no odiamos a los antagonistas, no queremos a los protagonistas. Los miembros de los distritos que son preparados desde su nacimiento parecen más un grupito de idiotas de instituto que unos luchadores fríos y letales, la pequeña Rue aparece en un pequeño momento, no desarrollan su relación con la protagonista, y la matan sin más. Y nos quieren hacer creer que la protagonista llora de tal manera su muerte, cuando apenas se han relacionado en la película. La pareja protagonista es un quiero y no puedo, no desarrollan una química creíble, y piensas "Ah, que se han enamorado... ¿Por qué, exactamente?".
-El gran fallo son los antes mencionados antagonistas dentro de la competición. Como he dicho, se nos presentan como máquinas de matar, entrenados desde su infancia para esto. Y, en el juego, son niñatos de instituto que se ríen en grupo. La escena del árbol es PATÉTICA (así, en mayúsculas). Empiezan acorralando a la protagonista, y ninguno es capaz de matarla ni con un arco (menudos fracasados, ¿y estos eran los mejores, los más preparados?). Durante la noche, todos se duermen (claro, no pueden pensar que la prota vaya a bajar y los mate, o que algún miembro los asesine, recordemos que es la base de la competición. "Que no, que la Vane nunca me mataría, que somos colegas"). Lo mejor es el deus ex machina de la colmena. De repente, ahí está, hay una colmena, justo en ese árbol. Perfecta para que la protagonista se libre de milagro. Aunque creo que si hubiese bajado, ni podrían haberle acertado aun estando a un metro de distancia.
-Los protagonistas no están en peligro, no sufren riesgos. ¿Que la prota se quema? Recibirá un ungüento. Si el prota está herido, pondrán a su disposición medicinas, eso sí, con un poco de dificultad en su obtención.
-Otra escena memorable, destruir los recursos del grupo antagónico. Dejan un guardia, la pelirroja pasa corriendo, roba (da saltitos, lentamente, para evitar las minas), sin que éste se dé cuenta. La prota no dispara una flecha y mata al guardia, no, simplemente decide esperar a que se vaya, perdiendo tiempo que podría ser valioso.
-Vamos al desenlace, el clímax: sueltan unos lobos mutantes (que en el libro, según tengo entendido, son una especie de avatares mutados de los caídos en la competición) que persiguen a los protas. Éstos se suben a una nave (o algo así, ni me he fijado en qué era) y ahí se topan con el líder de sus enemigos. La escena es ridícula: va, y sin tomarlo ni beberlo, nos suelta un discursito existencial que nos la suda al ser uno de los muchos secundarios superficiales en los que no se ha profundizado. La reacción del espectador es "ah, pues bien, qué se le va a hacer, matadlo ya y terminad con esto". En fin, al final, más de lo mismo, el malo la palma y la chica se salva.
-Lo poco salvable de esta película es su comienzo, las escenas de Sutherland y la escena final de Seneca, con esa invitación al suicidio con las bayas venenosas sobre la mesa.
En definitiva, no llega al aprobado. Tengo la sensación de que, si hubiesen mezclado la premisa de esta película con el desarrollo y crueldad de Battle Royale, hubiese salido algo más potable.
-Los personajes no se definen, son intrascendentes. No los llegamos a conocer, por lo que no odiamos a los antagonistas, no queremos a los protagonistas. Los miembros de los distritos que son preparados desde su nacimiento parecen más un grupito de idiotas de instituto que unos luchadores fríos y letales, la pequeña Rue aparece en un pequeño momento, no desarrollan su relación con la protagonista, y la matan sin más. Y nos quieren hacer creer que la protagonista llora de tal manera su muerte, cuando apenas se han relacionado en la película. La pareja protagonista es un quiero y no puedo, no desarrollan una química creíble, y piensas "Ah, que se han enamorado... ¿Por qué, exactamente?".
-El gran fallo son los antes mencionados antagonistas dentro de la competición. Como he dicho, se nos presentan como máquinas de matar, entrenados desde su infancia para esto. Y, en el juego, son niñatos de instituto que se ríen en grupo. La escena del árbol es PATÉTICA (así, en mayúsculas). Empiezan acorralando a la protagonista, y ninguno es capaz de matarla ni con un arco (menudos fracasados, ¿y estos eran los mejores, los más preparados?). Durante la noche, todos se duermen (claro, no pueden pensar que la prota vaya a bajar y los mate, o que algún miembro los asesine, recordemos que es la base de la competición. "Que no, que la Vane nunca me mataría, que somos colegas"). Lo mejor es el deus ex machina de la colmena. De repente, ahí está, hay una colmena, justo en ese árbol. Perfecta para que la protagonista se libre de milagro. Aunque creo que si hubiese bajado, ni podrían haberle acertado aun estando a un metro de distancia.
-Los protagonistas no están en peligro, no sufren riesgos. ¿Que la prota se quema? Recibirá un ungüento. Si el prota está herido, pondrán a su disposición medicinas, eso sí, con un poco de dificultad en su obtención.
-Otra escena memorable, destruir los recursos del grupo antagónico. Dejan un guardia, la pelirroja pasa corriendo, roba (da saltitos, lentamente, para evitar las minas), sin que éste se dé cuenta. La prota no dispara una flecha y mata al guardia, no, simplemente decide esperar a que se vaya, perdiendo tiempo que podría ser valioso.
-Vamos al desenlace, el clímax: sueltan unos lobos mutantes (que en el libro, según tengo entendido, son una especie de avatares mutados de los caídos en la competición) que persiguen a los protas. Éstos se suben a una nave (o algo así, ni me he fijado en qué era) y ahí se topan con el líder de sus enemigos. La escena es ridícula: va, y sin tomarlo ni beberlo, nos suelta un discursito existencial que nos la suda al ser uno de los muchos secundarios superficiales en los que no se ha profundizado. La reacción del espectador es "ah, pues bien, qué se le va a hacer, matadlo ya y terminad con esto". En fin, al final, más de lo mismo, el malo la palma y la chica se salva.
-Lo poco salvable de esta película es su comienzo, las escenas de Sutherland y la escena final de Seneca, con esa invitación al suicidio con las bayas venenosas sobre la mesa.
En definitiva, no llega al aprobado. Tengo la sensación de que, si hubiesen mezclado la premisa de esta película con el desarrollo y crueldad de Battle Royale, hubiese salido algo más potable.