Y es que el fallo más garrafal, es que, se supone que en esa playa solo pasa el tiempo rápido, o sease, que solo envejecen biológicamente, no mentalmente. Pero vemos como los niños se hacen mayores y entienden cosas que no han vivido, comportándose como adultos.
Es un fallo tan mayúsculo que tira por tierra toda la trama.
Telita también con el pedazo tumor que extirpan, simplemente con una navajita del "todo a 100".
La muerte de la rubia cañón, resulta cómica, fuera de contexto total, como he leído en alguna crítica, parece una escena de "scary movie", tal cual.
Un poco penoso ese final poniéndonos cómo salieron del coral que estaban enganchados, a ver, no somos lerdos, se soltó y ya, si no me vas a contar algo transcendente, no lo expliques cómo si fueramos tontitos, salen a la superficie y te meten un plano larguísimo en el que no hacen nada, que me quieres contar.
Eso sí, la idea de que es una farmacéutica que hace experimentos para sacar más rápido sus medicamentos tiene su punto, y no lo ves venir. Lo de que exista una playa con esas características ya no voy a decir nada porque resulta extremadamente fantasioso.