A mejores momentos pasaron esos niños, envueltos por el misterio y la magia, para dar paso a estos pseudoadolecentes, que si bien usan magia para sus intereses, no dejan que esta les arrope.
La música, ya pasó a mejor vida, y algo me indica que de aquí solo queda declive...
Si bien esta trama tiene más agujeros que líneas, y pretende ser más madura de lo que es, tiene una gran virtud, y es que la paulatina construcción del personaje de Voldemort es constante, pero no resulta hasta este momento el pilar de soporte para la trama.
Me gusta el plot twist que involucra a nuestro buen amigo "Ojo loco" pero me resulta como poco desagradable el que de forma reiterada se nos mencione una ya vieja conocida "poción multijugos"
Fascinante me resulta la maestría con la que se permite a los protagonistas crecer, y dejar que esto se vea acompañado por la profundidad de sus tramas, pero ciertos tópicos, como son la estrecha correlación entre el Quiddich y la catástrofe, se me hacen insoportables, de la misma forma que lo son las estrafalarias modestias que se toman los villanos para capturar a Harry Potter.
Me gustaría poder dejar algo más como producto del análisis, pero la tesis de la obra es particularmente superflua, y si el matar a un personaje por primera vez en Harry Potter no era suficiente, Hermione se encarga de clarificarnos el rumbo que tomaría la saga con un sutil: "Ya nada va a ser igual"