Tercera película en la filmografía de este rudo californiano, cineasta revisionista del western de finales de la década de los 60 y comienzos de los 70 en el siglo XX, y que aprovecha los cimientos de la novela epónima de uno de los creadores de "Harry el sucio", Harry Julian Fink, a la postre coguionista junto con el propio Peckinpah y Oscar Saul de esta cinta muy en la honda de "Centauros del desierto" en cuanto a temática, aunque más ruda y menos épica que aquella, y con una estética muy similar al posterior "Dos hombres y un destino" de George Roy Hill y más en concreto a la coetánea de ésta y obra suya propia "Grupo salvaje" inmediata antecesora de la obra en cuestión...

Una gran fotografía en color polvoriento, como acostumbraba a reflejar el maestro californiano a cargo de Sam Leavitt, nos sirve para adentrarnos en la persecución implacable por cuestiones de honor y de gloria del major Dundee (Charlton Heston),y su obsesión leviatánica por sus famosas remembranzas mellvillianas, al frente del fuerte Benlin, en Nuevo México, durante los años 1964 al 1965 en plena guerra civil norteamericana, sobre un grupo de apaches a las órdenes del sanguinario jefe Sierra Charriba (Michael Pate) que acaba de cometer una masacre en el rancho yanki de Rostes, Nuevo México, donde ha asesinado a toda la población dejando sanos aunque bajo su cautiverio para su crianza como apaches, a los niños varones...

Peckinpah retrata a su manera aquellos años por el polvoriento desierto de Nuevo México, en la frontera con el país azteca, cuando los unionistas del norte intentaban controlar la anarquía del sur mediante los famosos fuertes...el abolicionismo de la esclavitud, la rapiña india en mitad del caos...los azules contra los grises...Las canciones de unos frente a las canciones de otros...

Una obsesiva búsqueda de redención y gloria a lo "Moby Dick" de Melville (Dundee como el capitán Achab, Tyreen comos Starbuck, el cronista Ryan como Ismael,y Sierra Charriba y su tropa como la ballena blanca) por parte de un oficial unionista al mando de una caterva de personajes variopintos y heterogéneos que van desde mercenarios, renegados, borrachos, confederados amotinados ("yankis galvanizados") al frente de un militar de Gettysburg con los unionistas que posterioemente desertó por no traicionar a su querido sur...con esclavistas, negros, etc...para salvar un grupo de niños y tal vez su zaherida reputación defenestrada al comando de aquel mítico fuerte de Benlin...

Como último apunte a reseñar, la extraordinaria interpretación del carismático Richard Harris como el capitán Benjamin Tyreen completan esta espléndida obra que deja bien a a las claras la extraordinaria dimensión de Peckinpah como cineasta conductor de historias renegadas llenas de una misteriosa e idílica belleza silvestre...

O B L I G A T O R I A.