Pero bueno, que continuación más errática de "G.I. Joe" (2009). No es que sea muy fan de esta franquicia por más que de niño viera la versión en dibujos animados, me hacía gracia lo tonta que era, pero es que no me entero de nada. Van pasando cosas que no capto bien, incluidas las peleas y los nombres de los personajes, mientras no dejaba de pensar en cuál es la continuación respecto a la primera: ¿el "hermano" del ninja no había muerto? ¿Este pseudopresidente de los Estados Unidos (Jonathan Pryce) no salía en una de "X-Men"? Y lo más importante, ¿de verdad han matado a... (SPOILER)? Esta decisión de hecho hunde por completo a "G.I. Joe: La venganza" entre la incredulidad y el desconcierto.

Aunque en realidad lo que realmente te da un puñetazo en la panza, lo sé, el juego de palabras es malo, es que han pasado olímpicamente de la original, barriendo a casi todos sus personajes y fichando a unas cuantas caras nuevas. Entre las bajas más dolorosas hay que citar la ausencia de Baronesa (Sienna Miller) y Scarlett (Rachel Nichols). Me pregunto qué clase de continuación es esta, quitando de un modo o de otro a las estrellas de la estupenda, no lo oculto, primera de "G.I. Joe". Jon Chu trata de solucionar el desaguisado con la atractiva Adrianne Palicki, aunque al no estar tan gorda como en "Legión" (2010) no está tan guapa, o Bruce Willis, pero la belleza de ella y el carisma de él no es suficiente.