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Voto de El malvado Carabel:
3
Drama Anton es un médico que divide su tiempo entre una idílica ciudad danesa y un campo de refugiados en África, donde ejerce su profesión. Anton y su esposa, padres de dos hijos, están separados y se plantean el divorcio. Elias, el mayor de sus hijos, entabla una estrecha amistad con Christian, un chico que acaba abandonar Londres para establecerse con su padre en Dinamarca. Sin embargo, Christian involucra a Elias en una peligrosa revancha ... [+]
27 de abril de 2011
21 de 34 usuarios han encontrado esta crítica útil
El film está muy bien vendido y explotado. Amor. ONGs. Violencia. Niños del Primer Mundo. Moralidad. Acción. Drama social. Niños del Tercer Mundo. Trama sentimental. Actualidad (Seguro que quedan más, pueden seguir ustedes). Los ingredientes están bien (nada que objetar) y el modo de empleo tampoco es el problema. Pues bien, este está en vestir con ellos un guión con trama enteramente de telefilm (la película se las da de cine, pero es televisión con más presupuesto de lo normal).

Empieza muy interesante, se nos comparan sociedades, se nos plantean duelos morales y sociales y se nos planta un problema de violencia en plena civilización. También nos añade una trama sentimental de la pareja protagonista y de amistad ente los dos niños que nos acercan más a esos personajes para identificarnos con ellos (con esto la película seguía arrancando bien, aunque estamos a su comienzo, los giros de telefilm empezarán a la media hora).

Recalcaré, las intenciones están muy bien, pero todo se turbia con lo ya dicho, la estructura de telefilm, que destroza la credibilidad de lo que cuenta dándole una errónea emoción (que ya de por sí la tenía) y ofreciéndonos finalmente una propuesta que ofende. Tenía muchas armas para poder ser un film personal, valiente y social, pero solo consigue satisfacer el último de estos tres adjetivos (y más o menos porque el tema de la violencia ya estaba en la calle).

Por favor, Susanne Bier, coge los mismo ingredientes, los mismos (y estupendos) actores, el mismo equipo (aunque corrigiendo ciertas cosas técnicas o de cámara como ese "dedo largo" con el zoom), pero haz una película con un guión natural que no parezca molde para televisión, entonces volveré a una sala de cine para ver tu trabajo, hasta entonces seguramente no me apetezca volver a pagar una entrada de cine por ver televisión.

Antena3 tiene ya claro donde haría el último corte publicitario en su programación de los sábados por la tarde; en el imperdonable momento/gritos de "¡Crhistian! ¡Crhistian!" del el clímax final en lo alto de la torre.
El malvado Carabel
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