Absolutamente estúpida, trillada y falta de gracia. Que los franceses se divirtieron con esta comedieta tonta y pueril y fué un exitazo en el momento de su estreno, no me la termino de creer. Tres solterones empedernidos por ciertos avatares del guión se encuentran al cuidado de una preciosa bebita. Y ahí se viene la catarata de obviedades para hacer reir: no saben cambiarle los pañales, no tienen idea cómo se prepara un biberón, se juegan la vida intentando bañar a la pequeña, y otras sandeces por el estilo. ¡Si si que graciosos y originales son ja ja me muero de la risa!. Lo cierto es que no provoca la mínima ternura y dejan a los hombres mal parados como idiotas que no saben lo elemental como atender a un bebé. Pestilente.