Si alguien pensó que Pixar se quedaría atrás en el mundo de la animación digital tras las relativas decepciones de "Los increíbles" y "Cars", "Ratatouille" recupera el trono perfeccionando un poco más la receta de los mejores platos cocinados por esta productora.

A saber: un guión escrito con tiralíneas sobre la aventura parisina de una rata con dotes para la cocina, una gran imaginación en el aspecto técnico, que otra vez es insuperable, y dos aspectos que captarán la atención de los mayores: la graciosa recreación no exenta de crítica hacia el mundo de la alta cocina, con sus extravagantes chefs y sus quisquillosos críticos, y una alegoría sobre la marginación que sufren las minorías representada a través de la relación entre ratas y humanos.