La suma de elementos de la vida real de modo equilibrado y funcional, en un lapso de tiempo justo y sin especular demasiado hacen de "El conjuro" (2013) una cinta que obtiene pulgares arriba y puede ir por más explotando una franquicia con buenos ingredientes e interesantes personajes.

Cabe señalar que la vara no estaba muy alta en el género, pero un elenco comprometido y lo interesante de descubrir la verdad tras hechos reales la hacen una película llevadera, de incierto desenlace y con sonrisas sin aliento tras poco menos de dos horas.

La experiencia de "El conjuro" es entretenida. Aventurarla como aterradora es relativo, pero de que consigue sorprender y generar momentos notables, eso es innegable.

Para ver en pareja o con amigos, no recomendada para menores o personas impresionables, y aunque esa sola advertencia o consejo pueda asustar a varios, lo cierto es que hay escenas bastante bien elaboradas que sin darnos cuenta podemos quedarnos pegados viendo aguantando el suspiro, porque el clímax se hace constante y en escalada.

Un aporte de la cinta es también su humanidad, que curiosamente a veces suele pasarse por alto en este tipo de films en desmedro de efectos innecesarios, pero que aporta un aire cercano a la hora darles un perfil y profundidad a personajes que son clave.

"El conjuro", de las buenas del último tiempo; no se le ocurra distraerse porque todo suma, tiene psicología y explicitud por partes hábilmente dosificadas. Salva ilesa y con honor tras insertarse en terrenos transitados como el bien y el mal. Aprueba.

Recomendación:
Buena. Un aporte al decaído género del terror y el suspenso basado en hechos reales.

=Cité de Lord Buyinski= www.buyinski.wordpress.com