Coges a unos cooperantes internacionales y los metes en zona de guerra. Lo mas probable es que te salga una película para llorar con lagrimones de litro y medio. Pero entonces llega Fernando León de Aranoa y además del nudo en la garganta es capaz de sacarte sonrisas y hasta carcajadas con un problema que no parece muy complicado si no fuera porque medio país sigue encabronado con el otro medio.
El “elenco protagónico” esta genial. Benicio del Toro y Tim Robbins, que llevan la película están que se salen. Sobre todo el último. Melanie Thierry, a la que no conocía, hace el papel de ingenua que va aprendiendo a medida que la película avanza. Olga Kirilenko sigue estando buenísima aunque la metas en una guerra, y con este tipo de personaje se va quitando el cartel de “niña guapa para salvar por héroe”.
Total… ¡Un peliculón! De esos para darle dos hostias al gilipollas de turno que te dice que no ve cine español porque es malo.