Espectacular; esa sería la palabra más adecuada para calificar el nivel de detalle de toda la animación de esta película; uno se puede maravillar viendo por ejemplo el realismo de los decorados; el pelo de los protagonistas, la luz y los colores que salpican la cocina de tonos rojo-cobrizos; los movimientos, todo ese tipo de cosas.... Pero como he llegado a la conclusión de que para ver cosas bonitas mejor me voy mejor al museo, me van a permitir que les lleve un poco la contraria a los apasionados de esta pequeña historia de ratas.

Me parece a mí que cuando a un aspecto técnico excelente no le acompaña un guión mediobueno (que no digo ya ni bueno...), ni unos personajes con un mínimo de carisma, ni por ejemplo, unos secundarios con encanto que aporten variedad, digámoslo así; "si la olla anda vacía", ¿no acaba uno por desesperarse esperando el plato fuerte?

Pues algo así me ha pasado a mí, se me ha quedado la mesa vacía; me han engañado con un guión con muy poca diversión, que solo ofrece unos pocos golpes y varias persecuciones (todas de rigor para darle un poco de acción a la cosa); y que además cae un poco en una especie de bucle repetitivo. (Cualquiera puede cocinar, cualquiera puede cocinar, cualquiera puede cocinar, cualquiera puede cocinar .... pues como eso con varios conceptos más...)

En mi opinión, no aporta nada que no nos haya ofrecido ya por ejemplo, Toy Story, Monstruos S.A., Los Increíbles, o Buscando a Nemo. Todas ellas inmensamente superiores y frescas en lo que a momentos divertidos se refiere; yo he visto en el cine varios niños aburriéndose como monos enjaulados y eso no puede ser un buen síntoma. Y lo que es a mí, ya lo he dicho; tan poco había para hincar el diente, que al final me han dejado con hambre. Supongo que es lo que pasa con la Nouvelle Cuisine; poco en el plato, pero muy bien presentado.

¡¡Quisiera hablar con el chef por favor!!

En todo caso; a disfrutarla ...